Este crecimiento para 2016 representa un 270%, a falta de los datos de diciembre, como queda dicho. En declaraciones realizadas al diario Jornal do Comercio, Sauaia explicó que ese crecimiento "demuestra claramente que la generación distribuida solar fotovoltaica avanza incluso en tiempos de incertidumbre económica y política", como los que actualmente se viven en Brasil.
También recalcó que los datos revelan que la generación distribuida "demuestra su solidez como una tecnología de gran potencial y la posibilidad real de reducir costos para la población y las empresas brasileñas".
Un 10% solar en 2030
En tanto, Sauaia aseguró a O Globo que pese a la suspensión de la subasta prevista para diciembre pasado, para el que dijo se preveían una contratación de 1.500 MW fotovoltaicos, la capacidad del sector podría alcanzar los 25 GW de potencia hacia 2030.
El presidente de Absolar justificó esos números en base a las proyecciones efectuadas por la Empresa de Investigación Energética (EPE, por sus siglas en portugués), lo que se traduciría en que si en 2015 la solar fotovoltaica representó un 0,02% de participación en la matriz energética, en 2030 se ubicaría en el 10%.
