Los parques que han entrado en funcionamiento, Carapé I y II, están ubicados en el departamento de Maldonado, y demandaron una inversión de 220 millones de dólares, de la que participó un préstamo por el 80% del total del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), esquema a financiar en 18 años en el que también han participado el Banco República (BROU), la Corporación Interamericana para el Financiamiento de Infraestructura (CIFI) y la Corporación Interamericana de Inversiones (CII).
El parque eólico Carapé I consta de 17 turbinas Vestas V112-3.0MW, con las que alcanza 50,1 MW de capacidad, instalado en la zona de Carapé, al norte del departamento de Maldonado, y desplegado en una superficie de más de 1.900 ha. Según la compañía, la cantidad de energía que se generará en promedio por año es cercana a los 210.000 MWh, suficiente para suplir de electricidad a 200.000 personas, lo que significa cerca de un sexto de la población de la ciudad de Montevideo. El parque evitará una emisión anual promedio calculada en 133.000 Tonelada de Carbono Equivalente (tCO2e).
Por su parte, el Parque Eólico Carapé II, situado en la misma zona que el anterior, está conformado por 14 aerogeneradores del modelo antes mencionado, por lo que su capacidad instalada es de 42,1 MW. La energía prevista al entregar al sistema eléctrico es 155.000 MWh anuales promedio.
A partir del contrato de venta de energía tipo PPA (por las siglas en inglés de Power Purchase Agreement) a 20 años firmado con la estatal eléctrica UTE, la Corporación América recibirá entre 65 y 85 dólares por cada MWh generado.