Por sectores -servicio público, comercial y residencial-, nuevamente lidera el de las grandes instalaciones, que con más de un GW representó el 58% de la capacidad fotovoltaica instalada en el trimestre. Por su parte, el comercial creció un 31% interanual, con una capacidad instalada de 437 MW. En tanto, las instalaciones residenciales instalaron 563 MW, un aumento del 1% respecto al trimestre anterior, aunque una caída del 17% interanual.
La primera mitad del año demuestra que la fotovoltaica representó el 22% de toda la nueva capacidad eléctrica conectada a la línea de trasmisión, sólo por detrás de la generada con gas natural.
Por estados, sigue liderando California seguido por Texas, que se proyecta como el segundo mayor mercado solar en los próximos cinco años, y que tuvo su trimestre más fuerte en la historia, al sumar 378 MW en el segundo trimestre. Luego se ubican Massachusetts, donde expiraban incentivos y Nueva York, que tuvo un trimestre récord en parte gracias una serie de proyectos de medición neta.
En términos económicos, la presidente y directora ejecutiva de SEIA, Abigail Ross Hopper, aseguró que "el año pasado, las empresas solares agregaron empleos 17 veces más rápido que el resto de la economía y aumentaron nuestro PIB en miles de millones de dólares."
Se prevé que la industria solar agregará 12,4 GW de nueva capacidad este año, ligeramente por debajo de la previsión anterior de GTM Research de 12,6 GW. Sí se mantienen otros pronósticos, como el que el sector triplicará su capacidad acumulada en los próximos cinco años. Así, para el año 2022, se espera que 25 estados tengan más de 1 GW fotovoltaico de capacidad, y más de 16 GW se instalarán anualmente en todo el país.